Jordania, al igual que Zambia, es otra gran desconocida del elenco futbolístico mundial. Su selección Sub-20 debutará en una cita mundialista y llega a Canadá como cuarta de Asia, sólo por detrás de Corea del Norte, Corea del Sur y Japón. Su mayor logro en la fase de clasificación fue eliminar a China, el gigante asiático al que venció por 2-1.
Plagado de futbolistas desconocidos, el artífice del resurgir jordano es su técnico, el danés Jan Bourge Polsen. Su experiencia en el cuerpo técnico de la Dinamarca campeona de Europa Absoluta en el 92, le sirvió para llevar a Singapur a grandes cotas de nivel y ahora quiere hacer lo mismo con Jordania.
"Se tardan diez años y 10.000 horas de entrenamiento en formar a un buen futbolista. Las asociaciones deben crear una estructura donde niños y niñas de seis o siete años en adelante puedan empezar a jugar", dice el técnico sobre su filosofía de apoyo a la cantera. Los jordanos han previsto tres concentraciones antes del Mundial (en Egipto, Turquía y Dinamarca). El país tiene 5.759.732 habitantes, el 70% de su población vive en ciudades y su capital es Amán.
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