El Barcelona percibirá 3,2 millones de euros del Arsenal como indemnización por los derechos de formación del centrocampista Fran Mérida, fichado por el conjunto inglés la temporada pasada sin ningún beneficio para el conjunto catalán.
Así lo confirmaron ayer a este diario fuentes del club azulgrana después de que un tribunal civil de Barcelona decidiera a su favor una reclamación por la pérdida del futbolista. Mérida llegó al Arsenal tras pedir al Barcelona su baja federativa cuando aún tenía 15 años. Debido a su edad, el club no tuvo más remedio que dársela, ya que ningún contrato profesional ataba al jugador a la entidad. El centrocampista, libre, desapareció durante unos meses hasta cumplir los 16 años, edad a partir de la que los clubes no deben pagar ya derechos de formación, y así poder fichar por el club inglés. El Barça denunció el caso ante la UEFA y al jugador ante un tribunal civil de Barcelona, que ahora le ha dado la razón. El futbolista deberá hacer frente al pago de 3,2 millones, aunque será seguramente su club, el Arsenal, el que abone la cantidad al Barcelona. El caso sienta un fuerte precedente en el marco legal para el traspaso de futbolistas de las categorías formativas al servir como jurisprudencia para futuras reclamaciones.
La resolución del caso pone en jaque la futura fuga de canteranos. El cambio de residencia servía para que los jugadores pudieran competir sin ninguna indemnización en otro equipo y también en otro país, como ocurrió el pasado verano, por ejemplo, con dos jugadores del Athletic de Bilbao que recalaron en la Premier League. Pero la decisión contra el futbolista supone que cualquier club de procedencia debe ser compensado por formar a un jugador pese a que éste haya conseguido su baja federativa. Vencedor en el caso de Mérida, el Barcelona intentará ahora recibir el mismo trato por el medio Daniel Pacheco, fichado por el Liverpool de la cantera azulgrana.
La partida de Fran Mérida generó un gran malestar entre los dirigentes del fútbol formativo del Barcelona. Antes de comenzar la temporada 2006-07, el centrocampista desapareció un buen día del Miniestadi tras pedir su baja. Su representante legal, Joseba Díaz, que manejaba una oferta del Arsenal, trató de evitar el pago por derechos de formación, consciente de que en el caso de que el jugador cumpliera 16 años jugando en el Cadete A del Barcelona el Arsenal estaría obligado a pagar, tal y como sucedió con Cesc Fàbregas.
En el caso de Cesc, que se acogió al cambio de residencia, el Arsenal terminó por pagar un millón de euros, más la condenación de la deuda contraída por el fichaje de Marc Overmars, después de que el Barcelona denunciara el caso ante la FIFA y se celebrara una negociación entre ambos clubes.
Hecha la ley, hecha la trampa. Mérida pidió la baja y el Barcelona se la concedió. Justo entonces, desapareció. "Si le hubiéramos localizado, hubiéramos actuado en consecuencia, denunciando al club que le hubiera dado de alta en la Federación Española", aseguró entonces un portavoz del Barcelona.
Meses después, el jugador apareció en Vitoria, donde residía. No tenía ficha pero trabajaba a diario entrenándose con el modesto equipo del Ariznabarra. Condenado a no jugar partidos oficiales, esperó paciente a cumplir los 16 años. Entonces se fue a Londres y quedó enrolado en las divisiones inferiores del Arsenal. Un año después firmó un contrato profesional con los gunners por cuatro temporadas y el 25 de septiembre pasado debutó oficialmente.
Paco Herrera, director deportivo del Espanyol, celebró el fallo legal ante la perspectiva que se abre para los equipos formativos, como es el caso del conjunto blanquiazul. "La decisión es muy importante para los equipos que fomentan la cantera", aseguró ayer Herrera. "Se abre una vía legal que protege nuestro trabajo y que evitará abusos de los equipos grandes", señaló. El Espanyol sufrió también la fuga de talentos el verano del 2006: Sergio Tejera pidió un cambio de residencia y se marchó a Londres para jugar en el Chelsea. Herrera, ex secretario técnico del Liverpool, movió ficha y pactó una indemnización con el conjunto de Stamford Bridge. "El fallo en el caso de Mérida nos permitirá trabajar más seguros", afirmó ayer, consciente de que hace sólo unos meses, en Montjuïc se vivió cierta angustia al saber que equipos ingleses habían tocado a Guillem Savall y Lucas Porcar, dos joyas de su cantera.
Bojan Krkic, de origen serbio y que acaba de cumplir 17 años, representó también un gran problema para el Barcelona por las numerosas ofertas que recibió. "Es del Barça desde pequeño y eso juega a nuestro favor. De no ser así, probablemente ya no jugaría con nosotros", reconocen fuentes de la junta directiva del Barcelona. Ahora, el joven delantero será oficialmente jugador del primer equipo si juega un minuto más con el Barça en Primera.
2 comentarios:
Contrato de 4 temporadas en 2007 significa que en 2011, con 21 años quedará libre.
Si triunfa, las presiones que sufrirá para renovar serán tremendas.
Pero si no lo hace, puede hacer lo mismo en el 2010?. Forzar su salida a bajo precio o quedar libre en el 2011 y obtener prima por tener carta de libertad?.
Dicen que Cesc tiene una clausula con el Arsenal que le permite forzar el fichaje por el Barça en caso de oferta.
¿Buena noticia? Con matices.
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